Por P. Bulmaro Aguila Tecuapacho
Es claro que nuestros seres queridos al morir transmigran al mundo celeste, pero realmente no sabemos si han alcanzado la plenitud, es por ello que debemos orar y ofrendar por su alma, sino tuviéramos conciencia de que ellos están con nosotros no tendría caso pedir por su alma. Luego entonces la ofrenda que nosotros colocamos en casa de acuerdo a una costumbre de varios siglos de historia nos sirve para recordar la esperanza escatológica de la venida nuevamente de los nuestros a este mundo en sentido cristiano en el momento de parusía es por ello que todo lo que colocamos en la ofrenda tiene un significado triunfal como lo son los colores, los frutos, el agua que prefigura el bautismo el renacer, el ser iluminados el ser hijos de Dios, el pan que nos hace alusión al banquete Eucarístico tanto terrestre como celeste, las banderas de color dorado que significan el triunfo de Cristo sobre la muerte, entre otras cosas más esto es un “SIGNO DE ESPERANZA”.
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